Ocio y Tiempo Libre como parte de la rehabilitación de personas con DCA
Podemos definir el ocio como el conjunto de actividades a las que puede dedicarse un individuo voluntariamente, después de quedar libre de sus ocupaciones, para descansar, divertirse, desarrollar su información o dar su participación social voluntaria como un fin por sí mismo.
No se puede conseguir la plena calidad de vida de las personas con daño cerebral adquirido, sin desarrollar una parcela fundamental para el bienestar emocional, el desarrollo de relaciones interpersonales significativas y la inclusión en sus comunidades de origen, el ocio.
Desde los programas de ocio de las asociaciones se pretende ofrecer a las personas con Daño Cerebral Adquirido, la posibilidad de participar en diferentes actividades y viajes que se desarrollan. Suelen ser servicios guiados por los principios de normalización, inclusión social y orientación a la persona usuaria. Hay que trabajar para que las personas con DCA lleguen a disponer de habilidades, conocimientos, destrezas y actitudes necesarias para disfrutar de su tiempo de ocio de la forma más autónoma posible o bien con los apoyos que le sean necesarios.
Para el buen funcionamiento de los programas de Ocio y Tiempo Libre se debe conocer y respetar en todo momento los gustos, preferencias y centros de interés de los beneficiarios. Darles la oportunidad de conocer distintas posibilidades y alternativas de ocio para que puedan elegir mejor según sus aficiones lo que más les gusta, dar libertad para elegir con quien quieren compartirlo en cuanto a compañeros y voluntarios. Así como trabajar con ellos el significado del ocio y sobretodo planificar con ellos dichas actividades.
Según el Manifiesto por un Ocio Inclusivo (2003) se define las claves para un ocio inclusivo comienzan por definir el “entorno inclusivo” que es aquel en el que todas las personas tienen cabida y se interrelacionan entre ellas, para lograrlo, se debe producir un cambio sistemático del mismo, tanto en la estructuras como en los procesos. Las necesidades de toda persona son de la misma importancia. Las políticas deben asegurar el acceso a toda persona a todos los equipamientos, servicios y programas de ocio de la comunidad. En la gestión de los proyectos de ocio, el fomento de la equiparación de oportunidades y la participación son elementos necesarios en la puesta en práctica de la filosofía de la inclusión.
Es por todo ello que desde las Asociaciones no se puede olvidar este ámbito de la vida de las personas, hay que verlo como una parte de la rehabilitación en un DCA pero también desde una visión lúdica y como una puesta en práctica desde todas las áreas trabajadas. Desde las asociaciones, se pretende mediante los talleres de Ocio terapéutico, que sirva como un entrenamiento para la vida diaria. Al acompañarlos en estos primeros momentos se sienten respaldados por los profesionales del Ocio y les sirve de ensayo para volver a retomar su ocio personal.